Desalojado un local ocupado ilegamente en el barrio Pla del Vent-Torreblanca

Una vez conseguida la autorización judicial, agentes de los Mossos d'Esquadra y de la Policía Local de Sant Joan Despí han desalojado hoy un local ocupado ilegalmente en la calle Lluís Companys del barrio Pla del Vent-Torreblanca.

Desde el Ayuntamiento aseguran que han trabajado con el juzgado y los servicios sociales "para lograr una solución a la ocupación de este inmueble" y que ahora se procederá a tapiar el acceso para evitar nuevas ocupaciones. Las mismas fuentes afirman que la operación se ha producido sin incidentes.

El pasado 11 de agosto también se procedió al desalojo de una sucursal bancaria ocupada y un día después se hizo lo mismo con la nave industrial situada en la calle del Gran Capità, en el barrio de Les Planes, que hacía semanas había sido ocupada también de forma ilegal.

En este último caso, el proceso se llevó a cabo con autorización del Juzgado de lo Contencioso Administrativo núm. 16 de Barcelona. Con esta autorización judicial, el alcalde de la ciudad, Antoni Poveda, requirió a Mossos y Policía Local que hicieran el desalojo para que la propiedad de la nave industrial pueda realizar unas obras de rehabilitación.

"Desde hace dos meses, el Ayuntamiento de Sant Joan Despí ha estado trabajando con la propiedad de la nave industrial de la calle Gran Capità y con el Juzgado para solucionar la situación de ocupación ilegal por parte de un grupo de personas", aseguraba Poveda. Asimismo, según fuentes municipales, también se habían realizado diversas reuniones con los vecinos para informarles de las actuaciones que se estaban llevando a cabo.

De hecho, los vecinos ya habían protagonizado semanas atrás, y sin incidentes, varias manifestaciones para pedir una solución a la problemática. Pero la noche anterior al desalojo de la nave se produjeron grandes disturbios y situaciones de violencia. Desde el Ayuntamiento aseguraron entonces que se añadieron a las protestas personas que no eran de Sant Joan Despí "con una clara actitud populista y provocadora" y con el objetivo de "crear confrontaciones del todo gratuitas y artificiales".

Tras los incidentes, el alcalde convocó una reunión de la Junta de Seguridad Local, que contó con la presencia de representantes de los diferentes cuerpos policiales (Mossos d'Esquadra, Policía Nacional, Guardia Civil y Policía Local). Durante la sesión, Poveda, además de agradecer la labor realizada por los cuerpos policiales en los últimos días, pidió más efectivos de Mossos en la ciudad, teniendo en cuenta los 500 nuevos agentes que tiene previsto incorporar próximamente la policía catalana, principalmente en la zona del área metropolitana de Barcelona. En este sentido, el alcalde recordó que los Mossos deben compartir con los efectivos de la Policía Local "la responsabilidad de garantizar la seguridad en el espacio público".