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Jueves, 15 de Abril de 2021
COMARCA

La Diputación de Barcelona refuerza el servicio de teleasistencia con tecnología digitalizada

La corporación y los ayuntamientos destinarán 47 millones de euros en los próximos tres años • Actualmente tiene más de 90.000 usuarios y está previsto llegar a los 105.000

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La Diputación de Barcelona ha presentado hoy la nueva etapa del Servicio Local de Teleasistencia, que pasará a denominarse Teleasistencia Avanzada, y que estará centrada en las mejoras vinculadas a la digitalización y de respuesta a las necesidades de las personas beneficiarias, tal como ha asegurado este mañana la diputada de Cohesión Social, Ciudadanía y Bienestar de la corporación, Lluïsa Moret. La también alcaldesa de Sant Boi ha dado a conocer las nuevas prestaciones del servicio que, a partir del 1 de mayo, contará con un nuevo contrato para el período 2021-2023, prorrogable hasta 2025 y adjudicado a la empresa Tunstall Televida.

 

El servicio cuenta actualmente con más de 90.000 usuarios y la previsión es llegar a las 105.000 personas durante el periodo del contrato. El coste estimado para poder realizar todas las mejoras previstas, aprovechando el contexto de desarrollo y transformación de las redes e infraestructuras de las telecomunicaciones, será de unos 47 millones de euros para los próximos tres años, de los cuales la Diputación aportará unos 22 millones (el 42% del total) y los 25 millones restantes vendrán de los ayuntamientos.

 

En concreto, se ampliará la tecnología complementaria orientada a reforzar la detección de riesgos en el hogar, como incendios y fugas de gas (se pasará de los 20.800 dispositivos actuales a 47.100), y sobre la salud de la persona, con dispositivos funcionales para detectar una caída, por ejemplo.

 

También se instalarán detectores de presencia, como los de movilidad/pasividad o los de apertura de puertas -normalmente instalados en la nevera o microondas-, que se programan para activar una alerta en caso de inactividad en un período de tiempo.

 

Asimismo, se instalarán kits de sensores inteligentes interconectados que informan de forma continua y permiten establecer patrones y alertas automáticas de riesgo, un proyecto basado en la inteligencia artificial que supondrá tener 3.000 domicilios inteligentes en tres años e instalar aproximadamente 18.000 dispositivos.

 

La accesibilidad universal es otro de los objetivos de este periodo. En este sentido, para que el servicio pueda ser utilizado por personas dependientes o con discapacidad, incorporará unidades domiciliarias y de control remoto adaptadas, con sustitución de locuciones de voz por silbidos, pulsador easy press o activación por soplo o aspiración.


Además, para rebajar la sobrecarga de los cuidadores se implementará un sistema avanzado de apoyo nocturno a través de la instalación de caminos de luces para prevenir caídas durante la noche y dispositivos de detección de enuresis o de ocupación de cama o sofá, para lo que será necesario disponer de terminales IP (digitales) en los domicilios. "Estos dispositivos IP los tendrán el 35% de los usuarios en 2023, pero éste es solo un pequeño hito", ha explicado Moret, que ha asegurado que la voluntad es que lo acaben teniendo el 100% de los usuarios lo antes posible.

 

Otra de las novedades más destacadas es que las llamadas de los usuarios al servicio pasarán a ser gratuitas y se articularán a través de una línea 900 de red inteligente, que tendrá un coste de 600.000 euros, asumidos por la Diputación. Además, habrá mayor periodicidad de llamadas al usuario (los que tienen servicio de intensidad moderada recibirán una cada 50 en lugar de cada 60, lo que representa un incremento de 48.000 llamadas al año) y más frecuencia de visitas (de una anual se pasará a una semestral, para personas con servicio de intensidad elevada, lo que supone un incremento de más de 5.000 visitas al año).

 

Asimismo, también se mejorará la plataforma web para la gestión municipal que se convertirá en más eficiente y ofrecerá a los ayuntamientos nuevas funcionalidades y herramientas de participación en una apuesta clara por la transparencia y el impulso que se quiere dar al trabajo con el territorio.

 

“Debemos hacer que el servicio crezca y que beneficie cuantas más personas mejor”, aseveraba Moret. “Desde la Diputación acompañaremos a los ayuntamientos en este camino y continuaremos impulsando diferentes actuaciones dirigidas a facilitar y ampliar las vías de acceso al servicio, simplificar los trámites burocráticos, implementar mecanismos de copago o disponer de la información necesaria para identificar a las personas con dependencia y / o discapacidad”, ha remarcado la diputada.

 

Más unidades móviles

 

El Servicio Local de Teleasistencia dispone actualmente de 29 unidades móviles. Un total de 16 son de primera respuesta, que son las que atienden emergencias y contingencias, y que tienen base territorial en L’Hospitalet, Martorell, Sant Feliu, Badalona, Berga, Calella, Granollers, Igualada, Manresa, Mataró, Sant Celoni, Sant Cugat del Vallès, Terrassa, Vic, Vilafranca del Penedès y Vilanova y la Geltrú.

 

Las otras 13 son de segunda respuesta y no tienen una ubicación concreta, ya que circulan por todo el territorio de la provincia para cubrir la actividad programada del servicio, como dar una atención post-duelo específica, una actualización tecnológica, tareas de mantenimiento o custodia de llaves, entre otras acciones. Estas unidades móviles de segunda respuesta se duplicarán y habrá un total de 26. Por lo tanto, a lo largo de estos próximos tres años, la flota total de vehículos pasará a ser de 42 unidades, y 29 de estos coches tendrán distintivo ambiental ECO o CERO.

 

A su vez, también se incorporarán nuevos perfiles profesionales, como psicólogos o teleoperadores, con el objetivo de dar respuesta a un servicio más especializado, accesible universalmente y con un mayor apoyo a los municipios.

 

Por último, también hay novedades con respecto a la teleasistencia móvil, que se complementará con más prestaciones como la geolocalización. Es decir, habrá detectores de riesgos fuera del hogar pensados especialmente para personas que viven solas en entornos aislados geográficamente y quieren seguir realizando actividades de forma autónoma.

 

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“Empezamos a explorar el monitoraje como una experiencia piloto a través de la geolocalización del móvil del usuario”, ha asegurado Moret, tras añadir que el objetivo es que la autonomía personal no se quede en el domicilio, sino que también sea comunitaria. “Esta lógica nos puede ayudar, por ejemplo, en las primeros etapas de una enfermedad como el Alzheimer”, ha resaltado, no sin antes matizar que antes se deben pactar los perfiles con los ayuntamientos y contar con el permiso del usuario o de su familia.

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