Prisión para uno de los detenidos por la desaparición de Janet Jumillas

El titular del juzgado de instrucción número 4 de Cornellà que investiga la desaparición de Janet Jumillas ha acordado el ingreso en prisión por un presunto delito de homicidio de Aitor G. P., de 32 años y nacionalidad española, al que los Mossos d'Esquadra atribuyen la desaparición y homicidio de la vecina de Viladecans de 39 años.

El detenido se acogió ayer a su derecho a no declarar ante el juez después de que los Mossos d'Esquadra hallaron el pasado martes indicios biológicos en su domicilio de Cornellà que acreditarían su hipótesis de que Jumillas sufrió una muerte violenta, aunque a la salida del juzgado aseguró que la desaparecida "era mi mejor amiga y no le quería ningún mal". El segundo detenido por los Mossos d'Esquadra, Cristian K., de 23 años, ha quedado en libertad con medidas cautelares por un presunto delito de encubrimiento después de negar cualquier relación con los hechos.

La División de Investigación Criminal de los Mossos d'Esquadra desplegó el martes un operativo en Cornellà en el que se llevó a cabo la detención de los dos hombres por su presunta vinculación con la desaparición forzosa de Jumillas el pasado 13 de marzo.

Los agentes policiales detuvieron a media mañana a Aitor G. P y procedieron a registrar su domicilio, con la presencia del arrestado. Posteriormente, detuvieron a otro sospechoso tras el registro de su domicilio el El Prat.

Los Mossos d'Esquadra llevaban tiempo rastreando el entorno de la mujer, madre de dos hijos, a la que se le perdió la pista cuando iba a realizar una gestión en la oficina de Hacienda de Cornellà. La mujer había quedado posteriormente con su sobrino para desayunar en Viladecans pero no acudió a la cita.

El coche de la mujer fue localizado el 18 de marzo junto a la oficina de Hacienda sin signos de criminalidad y aparcado correctamente. En la denuncia presentada por sus familiares el día después de su desaparición, éstos explicaron que tiene dos menores a cargo y descartaron desde el primer momento que se hubiera marchado de forma voluntaria.

Las primeras pesquisas policiales también hicieron sospechar que no se trataba de una desaparición voluntaria, por lo que la Unidad Central de Desaparecidos se hizo cargo del caso. La mujer no tiene pareja estable ni tampoco había manifestado anteriormente ninguna conducta o voluntad suicida. El titular del juzgado de instrucción número 4 de Cornellà ha decretado el secreto de sumario.