Igualdad, también en el deporte

Por primera vez en muchos años, el fútbol femenino ha acogido miles de espectadores en varias competiciones. El partido de Liga entre el Atlético de Madrid y el FC Barcelona, en el Wanda Metropolitano, alcanzó la cifra récord de 60.000 espectadores, y aquí, en el Baix Llobregat, más de 20.000 personas acudimos al estadio Cornellà-El Prat para ver jugar a l’Espanyol contra el Atlético. Asimismo, se ha registrado un importante incremento de espectadores en el mundial femenino en Francia y, en el europeo femenino de baloncesto, la fase final alcanzará seguramente niveles de expectación importantes.

Es un buen momento para el deporte femenino en nuestro país que debe aprovecharse: si hay incremento de espectadores aumenta el interés de los medios de comunicación y, con él, las esponsorizaciones y patrocinios. Es un círculo virtuoso: a mayor relevancia, más espectadores y más interés de las empresas para dar apoyo. Este crecimiento del deporte de élite acabará favoreciendo a todos los niveles de la práctica deportiva.

El auge del deporte femenino no es casual; es el resultado de la apuesta que está haciendo la sociedad por promover la igualdad. En muchos ámbitos se está despertando una conciencia por la lucha por la igualdad de género. En política, un gran ejemplo lo encontramos en la reciente constitución de los ayuntamientos, donde gracias a las normativas, se ha logrado un incremento sustancial de la presencia de las mujeres en la política local. En Viladecans, las mujeres son mayoría en el Pleno, con un 60% de los miembros del Consistorio. El mayor porcentaje de Catalunya, en ciudades de más de 50.000 habitantes. A nivel laboral, tanto las leyes de conciliación como la labor que se está haciendo desde los sindicatos y el Gobierno están promoviendo la igualdad salarial, una de las brechas más importantes que tiene la relación de género. Aunque queda mucho por hacer, son muchos los ámbitos donde se están removiendo las conciencias y se está intensificando la lucha por la igualdad.

El deporte de élite es un gran escaparate mediático. Por ello, es muy importante que se aborden políticas de igualdad en este ámbito, que llamen la atención y ayuden a concienciar a todas las generaciones del derecho que todos y todas tenemos a ser considerados iguales, sin ser discriminados a causa de nuestro género. Ahora bien, el fomento de la igualdad debe existir tanto en el deporte profesional y las modalidades más conocidas, como en el deporte amateur y en todas las prácticas que tienen que ver con la salud y el ocio de la ciudadanía.

En Viladecans vamos a impulsar una medida pionera en España: un plan de promoción de la presencia de la mujer en el deporte. A todos los niveles, en todos los clubes y en todas las especialidades. Para ello destinaremos ayudas económicas y ayuda técnica y recursos para promocionar a aquellos clubes que realicen más esfuerzos en ese sentido, y apoyen no solo la presencia de la mujer en el mundo del deporte, sino también su continuidad, ya que el abandono prematuro de las disciplinas deportivas afecta más a las mujeres que a los hombres.

Este plan se enmarcará dentro de la política deportiva general de promoción del deporte para el conjunto de la población. Nuestro objetivo es doblar el número de federados en nuestro municipio e impulsar espacios para la práctica del deporte, tanto en nuestros parques urbanos como en los espacios naturales, y tanto como actividad más técnica o profesional como de ocio y tiempo libre. Un incremento de tal impacto de deportistas conllevará desarrollar un plan de instalaciones que supondrá doblar la capacidad, para permitir el crecimiento de nuestros clubes y, en general, de la práctica deportiva en la ciudad.

Nuestra sociedad está cada vez más comprometida en derribar las barreras que impiden la igualdad efectiva de género en todos los ámbitos. Viladecans quiere ser ejemplar en uno de los más visibles, como es el deporte.