El mal trato a las personas mayores

El Consell Consultiu de la Gent Gran del Baix Llobregat ha aprobado recientemente un manifiesto con motivo del 15 de junio, Día Internacional de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez, un problema grave, global y transversal, que afecta a millones de personas en todo el mundo y sobre el que, en general, no existe conciencia.

Es evidente que vivimos en una sociedad donde ser, parecer o mantenerse joven, es una idea que está presente en casi todos los ámbitos y todos los días de nuestra vida, y que la mayoría de las personas asumimos sin darle más importancia. Consecuentemente, tampoco damos importancia a la idea contraria, el desprecio hacia lo viejo, y todo lo que conlleva.

La discriminación de “lo viejo” se concibe como algo natural. Todo lo viejo, también las personas. Comentarios como “Pareces un viejo” tienen una clara connotación negativa y a nadie sorprenden. Sin embargo, parece bastante ridículo discriminar algo que la mayoría de las personas seremos tarde o temprano, ¿no?

El edadismo está absolutamente aceptado y normaliza el mal trato a las personas mayores. No dejarlas decidir por sí mismas, infantilizarlas, menospreciar su opinión, sobremedicarlas, expoliar su patrimonio, etc... El maltrato a las personas mayores es una realidad muy cercana que se produce normalmente en el espacio íntimo y personal, pero existe también un maltrato institucional.

Tal vez las evidencias más claras del edadismo las hemos visto durante la pandemia. El ejemplo más dramático son, sin duda, las 30.000 personas fallecidas en las residencias, de las que ya parece que ni nos acordamos. Pero también me gustaría destacar el tratamiento por parte de los medios de comunicación, normalizando las muertes por covid de personas mayores.

Las personas mayores tienen el mismo derecho a la vida y a la salud que cualquier otra persona, y sus vidas no tienen menos valor porque hayan vivido más años.